Película brasileña del director argentino Cristian Ponce. Durante una tormenta un grupo de bomberos evacúa un asilo de ancianos que esconde algo siniestro.
Por Nicolás Bianchi
Abraço de Mãe, en su idioma original, es un film de terror que devela paulatinamente un mundo con secretos oscuros. Pero no busca atar todos los cabos, sino que deja que el espectador elabore una parte de esta historia por su propia cuenta. Además, usa como contexto una inundación en Río de Janeiro. Esto no refiere a ningún evento del pasado en particular aunque se trata de un fenómeno bastante frecuente en esta zona.
La película comienza con un cold opening en el que en un hogar humilde se produce un incendio. En este espacio, una niña sufre un primer contacto con algo maligno que la roza y la quema. En su adultez, esta mujer, Ana (Marjorie Estiano), integra un cuerpo de bomberos. De alguna manera, este juego con el fuego y el agua se va a mantener presente durante todo el relato.
Más tarde, Ana, junto a otros compañeros, debe resolver una incidencia menor en un depósito en el que un vehículo se ha atascado con el portón. Mientras tanto, la tormenta se comienza a formar. Ante esta amenaza y una más que probable inundación, el grupo de bomberos debe evacuar un asilo de ancianos. El director o la figura principal de este establecimiento es Ulisses (Javier Drolas), alguien que evidentemente tiene una agenda oculta.
Rápidamente queda claro que el mal sugerido en la introducción y en el garaje del almacén está presente en este asilo. Todo allí es extraño. Los ancianos prácticamente no hablan. Hay otros adultos más jóvenes que los acompañan, también en silencio. Que Ulisses sea un extranjero que habla con acento agrega una capa más de extrañeza. Todo se complica aún más cuando Ana descubre la presencia de una niña.
En alguna medida, Abrazo de madre se convierte en una película de encierro en una casa encantada o maldita. La combinación entre este espacio y un afuera en el que se desarrolla una tormenta bestial funciona bien para crear una sensación de urgencia. Además, la película está filmada con cierta elegancia. El cuartel de bomberos, la casa y el garaje son espacios que lucen bien. En general, la película se ve mejor que la media de las producciones que ofrecen las plataformas como Netflix.
Por último, el mal que presenta el film es intencionadamente ambiguo. No parece haber un significado claro del proyecto que busca llevar a cabo Ulisses. A su vez, el elemento climático no está introducido a modo de denuncia, o para originar una reflexión, sino para agregar tensión. Abrazo de madre es una película de terror bien filmada que conserva una buena dosis de intriga en su propuesta.
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